El Coco es un fruto que perteneciente a las palmáceas originaria de las islas del pacífico y hoy cultivadas en todos los países del trópico.
Entre enero a julio se realiza su cosecha, diferenciándose en los tiempos y grado de madurez según el destino de este, ya sea para agua, productos deshidratado o aceite, para producir estos últimos se requiere que el coco esté seco o esté caído del cocotero.
Este fruto en una rica fuente de ácidos grasos una vez seco aporta fibra, lípidos, hierro, magnesio y selenio. Por contener un 86% de grasa (Fundación española de nutrición), se debe tener cuidado ya que su consumo podría aumentar los niveles de colesterol, por lo tanto debe ser consumido moderadamente.
Si comparamos las grasas saturadas de una cucharada de aceite de oliva versus una de aceite de coco son 2,1g y 13 g respectivamente. No existen estudios científicos de calidad que demuestren que realmente el aceite de este fruto reduzca el colesterol.
Beneficios del Coco
- Previene o mejora el estreñimiento.
- Puede utilizarse el aceite para remedios caseros para mejorar la piel y el pelo.
- Mejora el control de glicemia en pacientes con diabetes.
- Es antioxidante por su alta concentración de vitamina E.
- Mejora la inmunidad.
- Aporta en la formación de huesos y dientes.
- Su agua es ideal para deportistas y baja en calorías.
- Como exfoliante, rayado, ayuda a dejar la piel suave.
Recomendaciones para el uso del Coco
- No recomendado para personas con problemas renales dada su alto aporte de potasio.
- Personas con problemas cardiovasculares ya que eleva los niveles LDL más que otros aceites instaurados.
- No usar en frituras a altas temperaturas cambia su composición pudiendo afectar el organismo.
Este fruto tiene muchos beneficios pero lo importante es consumirlo con moderación e informarse muy bien sobre sus efectos secundarios en personas con algunos problemas de salud.